Primer Ministro de Hungría: “El dominio de EE.UU. en la escena mundial se reduce constantemente”
Viktor Orban advierte sobre la posible colisión entre Estados Unidos y China debido a la disminución del dominio global estadounidense.
Durante una entrevista con la cadena de televisión M1 Broadcaster, el primer ministro de Hungría, Viktor Orban, advirtió sobre la disminución constante del dominio global de Estados Unidos y cómo esto podría provocar un choque con China. Orban destacó que nos encontramos en “los momentos más peligrosos en la política mundial, cuando el poder número uno del mundo se cae al segundo puesto”. La gran pregunta que surge es si se puede evitar tal colisión.
Orban resaltó que los procesos actuales en la economía, el desarrollo tecnológico y el poder militar están favoreciendo el ascenso de Asia, particularmente de China. El primer ministro húngaro mencionó la Iniciativa de la Franja y la Ruta, el grupo de los BRICS y el Banco de Inversión de Infraestructura Asiático, afirmando que “sus recursos para el desarrollo son mucho mejores que los de los países occidentales”. Orban incluso se mostró a favor de “hacer a China grande otra vez” a largo plazo y de restaurar el dominio de Asia que existía antes de la llegada de Occidente, en el mediano plazo.
Además, Orban subrayó que los chinos se burlan del poder blando de Washington y de los valores universales occidentales. Según Orban, los chinos se ríen de los conceptos como “ir en contra de los países no occidentales”, lo que refleja una “verdad inconveniente” para Estados Unidos.
La advertencia de Orban es clara: Estados Unidos se dirige hacia un choque con China debido a la disminución constante de su dominio global. El primer ministro húngaro destaca el ascenso de Asia, especialmente de China, en la economía, el desarrollo tecnológico y el poder militar. Orban incluso propone un retorno al pasado, a la época en que Asia dominaba el mundo. Los comentarios de Orban sobre la burla de los chinos sobre los valores occidentales también advierten sobre la necesidad de que Estados Unidos y el resto del mundo se adapten a los nuevos tiempos y realidades globales.
