Opinión experta sobre llegada de buques iraníes a Venezuela
La opinión sobre la llegada de los buques iraníes a Venezuela resulta muy variada. El gobierno nacional celebra la colaboración de Irán hacia Venezuela, otros critican la destrucción de la industria petrolera. Según expertos esos envíos meten al país en un conflicto ajeno: el que enfrenta desde hace décadas a Teherán y Washington.
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Opinión común: Más problemas
Una flota de cinco buques, el primero de los cuales llegó a aguas bajo jurisdicción de Venezuela este sábado, trasportan 1,5 millones de barriles de combustible. Esto, según reportes de prensa, cuando la actividad de las refinerías venezolanas se ha desplomado junto a su producción de crudo.
¿Qué más traen los buques?. Más problemas para Nicolás Maduro.
Mayor tensión con Estados Unidos
Irán lanzó un reto a Estados Unidos al enviar tanqueros a Venezuela. «El arribo de la flota podría ser interpretado como una muestra de debilidad» de la administración de Donald Trump. Así lo expresa a la AFP el experto petrolero José Toro Hardy, exdirectivo de la estatal Pdvsa.
Con ello, según el especialista, Venezuela queda envuelta en un problema geopolítico.
Tras más de 40 años de roces entre Teherán y Washington, las tensiones alcanzaron nuevos picos el 3 de enero con la muerte del poderoso general iraní Qasem Soleimani en un ataque estadounidense que ese mismo día condenó el gobierno de Maduro.
De acuerdo con la internacionalista Giovanna De Michelle, los envíos afianzan una alianza estratégica entre países que Estados Unidos considera focos de amenaza.
El país caribeño era neutro frente a los conflictos del Medio Oriente hasta la era del fallecido presidente Hugo Chávez, quien formó lazos con el gobierno iraní que Maduro estrecha aún más, según Toro Hardy.
Nuevas sanciones
Venezuela y Irán, ambos con restricciones estadounidenses a sus exportaciones petroleras, podrían recibir más sanciones, dice a la AFP De Michelle.
A los ojos de Washington, continúa la analista, Venezuela es un Estado foragido, con el agravante de estar en Latinoamérica. Washington acusa a Maduro de dar refugio a células de Hezbolá y asevera que su ministro de petróleo, Tareck El Aissami, mantiene vínculos con esa organización; lo que Caracas niega.
Buscando asfixiar a Maduro, la Casa Blanca emitió una amplia batería de sanciones financieras económicas contra Venezuela.
La producción petrolera venezolana venía cayendo antes de las restricciones y actualmente es de 620.000 barriles diarios según la OPEP. Superaba los tres millones hace una década.
Impacto limitado sobre la escasez
«El combustible iraní da aire a Maduro en el próximo mes, pero no va a arreglar el problema gravísimo» del desabastecimiento de combustible, estima el especialista petrolero Luis Oliveros.
Previo a la cuarentena decretada en marzo frente al covid-19 en Venezuela se consumían entre 70.000 y 80.000 barriles diarios en medio de una recesión económica encaminada a su séptimo año, según Toro Hardy.
Y la oferta bajó a un quinto de ese total, expresa Oliveros.
La actividad de las refinerías de Venezuela cayó dramáticamente en los últimos años y el país, con reducido flujo de caja por la baja de su producción y de los precios internacionales, debe importar gasolina para consumo interno
Ganancia para Irán
De mantener exportaciones a Venezuela, Irán encontraría salidas para sus sancionados productos petroleros, dice De Michelle. Ello en medio del derrumbe del mercado mundial por la caída de la demanda por la pandemia del nuevo coronavirus.
Sin embargo, «hay mucho oscurantismo sobre cómo Venezuela está pagando», considera.
El presidente interino, Juan Guaidó, denunció que el régimen transó el combustible con oro extraído ilegalmente en las vastas zonas mineras del sur de Venezuela.
Washington respalda la acusación.
Perturbación para Trump
De acuerdo con De Michelle, la transacción crea una perturbación para Trump, quien ha usado a Venezuela como bandera buscando el voto latino en Florida, crucial para su reelección.
No cree que la tensión escale más allá de sanciones. «Es el momento menos oportuno para que Washington abra un nuevo frente bélico», dice la internacionalista, después que Teherán advirtiera de «consecuencias» si Estados Unidos impedía la llegada de los tanqueros a Venezuela.
Con información de El Nacional