Mujer fue estrangulada por su propio hijo en Ocumare del Tuy
El cuerpo fue hallado sin vida en la vivienda. Foto: Referencial.
Una mujer identificada como Dora Anseume, de 63 años de edad, fue estrangulada por su propio hijo, quien presuntamente la agredía constantemente, aseguran vecinos de la urbanización Araguita de Ocumare del Tuy, estado Miranda.
Fue localizada sin vida en el interior de su residencia la tarde del 23 de octubre de 2020, estaba tirada en el piso de su habitación, con una correa atada a su cuello. Presuntamente se había colgado de una viga, pero, debido a su peso, cayó al suelo.
Esa fue la primera versión que manejó el Cicpc, de acuerdo con la escena del crimen y con lo declarado por el hijo de la víctima, David Alexander Olivares Anseume (38). Al momento del hecho, Olivares estaba en la residencia, no obstante, dijo a las autoridades que se encontraba descansando en su cuarto y, al no escuchar a su mamá, se acercó a su habitación y la halló sin vida.
Cinco días después del hecho, David Alexander fue detenido. Las investigaciones del Cicpc y los exámenes médico-forenses determinaron que su madre no se suicidó, sino que presuntamente fue estrangulada. Dora presentó hematomas en su cuerpo; su hijo: rasguños. La policía presume que ambos forcejearon. Un tribunal de control, tras la imputación de la fiscalía, le dictó privativa de libertad a David Alexander, quien permanece detenido en el Eje contra Homicidios del Cicpc de los Valles del Tuy.
Llevó una vida dura
Un vecino de Araguita, que pidió mantener su nombre en reserva, contó a El Pitazo, el 29 de octubre, que tras separarse de su pareja sentimental, Dora se dedicó al cuidado de sus tres hijos. «Llevó una vida dura, sobre todo después de que mataron a su hijo, Víctor José Olivares (33), durante un procedimiento del Cicpc, el 21 de abril de 2018».
Según narró, la mujer tenía dos años y medio pidiendo justicia por este caso, al considerar que se trató de una ejecución extrajudicial; sin embargo, nunca encontró que su voz fuese escuchada por la fiscalía que llevaba el caso.
Dijo además que el comportamiento de David Alexander era motivo de preocupación para su madre. «Se la pasaba por el urbanismo con un arma blanca amedrentando a los vecinos e incluso a las mujeres. Tenía trastornos mentales y era adicto a las drogas. Maltrataba a su madre. En diciembre de 2019 la corrió de la casa y ella se fue a vivir con su otra hija, pero allá seguía acosándola, hasta hace un mes que ella decidió regresar».
Cuando Dora volvió a su residencia se encontró con que no estaba la bombona de gas, tampoco la bolsa Clap de este mes. David Alexander las había vendido. Ello limitó sus labores en la cocina. «Preparaba los alimentos en casa de sus vecinos hasta que reunió para comprarse una cocina eléctrica. Ese día fue al centro de Ocumare y de regreso se veía contenta con su hornilla; entró a su casa y al ver que David Alexander no estaba, salió a buscarlo».
La fuente vecinal informó que cuando encontró a su hijo, Dora le recordó que le tocaba la pastilla para su tratamiento psiquiátrico y que ella quería dormir un rato porque tenía cinco días sin descansar. Lo tomó de la mano y se fueron caminando hacia la casa. Al rato el joven salió, le pidió agua a un vecino, tomó un sorbo y le dijo que necesitaba un cigarro. Regresó a su vivienda y enseguida volvió a salir, pero esta vez gritando que su mamá se había ahorcado.
«Estamos recogiendo firmas en la comunidad para que, debido a la condición de este hombre, no lo dejen libre, sino que le busquen un centro de reclusión o de tratamiento, porque representa peligro para los vecinos», dijo el residente de Araguita
Los vecinos creen que David Alexander le pidió dinero a su mamá para comprar drogas, y al ella negárselo, se enfureció. «Eso ya había ocurrido en otras oportunidades. En sus últimos días, esa señora vivió un infierno», aseguraron.
Con información de El Pitazo
