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Luis Rubiales toma la decisión de renunciar a la Real Federación Española de Fútbol en medio de un escándalo

Renuncia de Luis Rubiales sacude a la Real Federación Española de Fútbol después de escándalo

El fútbol español se enfrenta a la tarea de encontrar un nuevo líder, ya que Luis Rubiales, figura prominente en el ámbito futbolístico al desempeñar los cargos de presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y vicepresidente de la prestigiosa Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA), ha tomado una decisión trascendental. En medio de una vorágine de críticas fulminantes debido a un gesto polémico, el dirigente ha presentado su renuncia a ambos puestos que ocupaba con distinción y responsabilidad.

La noticia se dio a conocer a través de un comunicado publicado en su cuenta oficial de la conocida red social X, donde Rubiales compartió las razones que lo llevaron a tomar esta determinación. A pesar de enfrentar una persecución desmedida y de ser víctima de falsedades que han afectado a sus seres queridos, Rubiales mantiene la esperanza de que la verdad se imponga en última instancia. Su suspensión por parte de la Comisión Disciplinaria de la FIFA y los diversos procedimientos abiertos en su contra han dejado claro que no podrá continuar ejerciendo su liderazgo en el mundo del fútbol.

Es oportuno recordar que el pasado 20 de agosto, la selección femenina de España obtuvo un triunfo épico al vencer a Inglaterra en la emocionante final de la Copa Mundial de la FIFA, alzándose así con el codiciado título de campeonas del mundo por primera vez en su historia. Sin embargo, el momento de celebración se vio empañado por el sorprendente beso que Rubiales depositó en los labios de Jenni Hermoso durante la ceremonia de premiación. Este gesto desató una ola de controversia y críticas sin precedentes en el ámbito deportivo y más allá.

En un principio, tanto Rubiales como Hermoso defendieron el beso como un acto espontáneo, carente de malicia. No obstante, posteriormente, la propia Hermoso solicitó medidas disciplinarias contra Rubiales, lo que llevó al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a considerar insuficientes las disculpas ofrecidas por el dirigente deportivo. Incluso varios miembros destacados del Ejecutivo se unieron al coro de voces que exigían la renuncia de Rubiales, y la Fiscalía de Madrid se vio compelida a abrir una investigación basada en la sospecha de agresión sexual.

En un contundente comunicado emitido por el sindicato deportivo FutPro, las 23 jugadoras del equipo nacional hicieron saber su postura firme y decidida: no participarían en futuras convocatorias mientras Rubiales permaneciera en su cargo, dejando en claro su rechazo a la situación que se había generado.

Como consecuencia de todo este torbellino de acontecimientos, la Comisión Disciplinaria de la FIFA tomó cartas en el asunto y suspendió a Rubiales por un período de 90 días, además de prohibirle cualquier tipo de contacto con Jenni Hermoso. En respuesta a esta situación, la RFEF anunció que Pedro Rocha Junco, vicepresidente de la federación, asumiría temporalmente el cargo de máxima responsabilidad durante el periodo de suspensión de Rubiales.

Así, un capítulo controvertido y convulso llega a su fin en la carrera de Luis Rubiales, dejando a su paso una estela de polémica y descontento. Mientras el fútbol español se enfrenta a la tarea de encontrar un nuevo líder, queda por verse cómo se desenvolverá el futuro de la RFEF y la UEFA sin la figura que una vez ocupó un lugar destacado en su cúspide.

“Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación, ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta”, dijo Rubiales.

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