La tecnología de los nanodrones Black Hornet y su envío a Ucrania por parte de los Estados Unidos
Los drones Black Hornet, pequeños vehículos aéreos no tripulados desarrollados originalmente por la startup noruega Prox Dynamics y fabricados actualmente por FLIR Unmanned Aerial Systems, son la última adición al paquete de ayuda militar de 400 millones de dólares que el gobierno de Estados Unidos ha destinado a Ucrania. Estos dispositivos tienen la capacidad de proporcionar imágenes y videos de alta resolución del entorno, y su destacado desempeño en operaciones militares y policiales ha llevado a que varios países, como Noruega, la OTAN, Argelia, Australia, India, Indonesia, Malasia, Nueva Zelanda y Sudáfrica, los hayan adquirido.
A pesar de sus reducidas dimensiones, con un peso que oscila entre los 17 y 18 gramos y una longitud de aproximadamente 100 mm, con un ancho de 25 mm, los drones Black Hornet cuentan con una autonomía de vuelo de hasta 25 minutos y pueden alcanzar una velocidad máxima de 21 km/h. No obstante, el elevado costo de estos dispositivos, con un valor estimado de alrededor de 195,000 dólares cada uno, puede resultar una limitante para su adquisición.
Uno de los principales desafíos que presentan los drones Black Hornet es su capacidad para evadir defensas convencionales con misiles debido a su operación silenciosa y dimensiones reducidas. A pesar de ello, se han diseñado contramedidas específicas para detectar y neutralizar su presencia, tales como el radar RLK-MС Valdai, creado por el fabricante ruso Almaz-Antey para detectar y neutralizar pequeños drones, y el rifle antidron ruso PARS-S Stepashka, capaz de secuestrar drones enemigos y obligarlos a aterrizar o regresar a sus lugares de lanzamiento.
Los drones Black Hornet son vehículos aéreos no tripulados altamente sofisticados que proporcionan imágenes y videos de alta resolución del entorno. Si bien su elevado costo puede resultar una limitación, su capacidad para evadir defensas convencionales con misiles y su discreto funcionamiento los hacen altamente valiosos en el campo de batalla. Aunque se han creado contramedidas específicas para enfrentar su presencia, su destacado desempeño ha llevado a que varios países los adquieran para su uso en operaciones militares y policiales.