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Kim Jong-un suspende plan de reiniciar acciones militares en frontera intercoreana

Kim presidió una reunión preliminar de la comisión militar, el martes, a través de videoconferencia, y decidió suspender los planes de acción militar, reportó la KCNA sin detallar más al respecto.

Corea del Norte dejó sin efecto los planes de militarización contra Corea del Sur, en una reunión de la Comisión Militar Central, presidida por el presidente del Comité de Asuntos de Estado norcoreano.

Así lo informó, este miércoles, la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte (KCNA, según sus siglas en inglés), provocando cuestionamientos sobre las intenciones de Pyongyang detrás de la medida.

La decisión fue sorpresiva porque se esperaba, de forma generalizada, que el Norte convocara una reunión de la Comisión Militar Central del gobernante Partido de los Trabajadores (WPK) para respaldar la amenaza de acción militar por parte del Ejército norcoreano contra el Sur, como furiosa represalia por el envío de panfletos anti-Pyongyang.

Kim presidió una reunión preliminar de la comisión militar, el martes, a través de videoconferencia, y decidió suspender los planes de acción militar, reportó la KCNA sin detallar más al respecto.

Añadió que, en la reunión preliminar, la comisión evaluó la situación actual y suspendió los planes de acción militar contra el Sur presentados por el Estado Mayor General del Ejército Popular de Corea del Norte para la quinta reunión de la Séptima Comisión Militar Central.

Asimismo, dijo que la reunión examinó los puntos de la agenda de una política militar importante que se presentará antes de la quinta reunión de la Séptima Comisión Militar Central del WPK, e hizo un estudio de un informe y decisiones, que se presentarán en la quinta reunión, y algunos documentos con las medidas estatales para reforzar aún más la disuasión de guerra del país.

Sin embargo, la KCNA no mencionó cuándo se celebrará la reunión regular de la Comisión Militar Central.

Corea del Norte ha intensificado las tensiones al tomar medidas de represalia contra Corea del Sur por el asunto del envío de folletos propagandísticos. Pyongyang ha llamado a Seúl un «enemigo» y cortado todas las líneas de comunicación transfronterizas, amenazando con más «castigos» futuros.

La semana pasada, el Norte explotó una oficina de enlace intercoreana, que fue establecida en su ciudad fronteriza de Kaesong como resultado de una cumbre entre las dos Coreas, celebrada en 2018.

Pyongyang ha dicho que volverá a desplegar sus tropas a las regiones fronterizas de Kaesong y la montaña Kumgang, que fueron desarmadas de conformidad con los acuerdos intercoreanos para los proyectos de negocios conjuntos, y amenazó con reanudar «todo tipo de ejercicios militares regulares» cerca de la frontera.

Asimismo, ha instalado, recientemente, unos altavoces militares para la emisión de comunicados propagandísticos a lo largo de la frontera intercoreana, después de que fueran retirados en virtud del acuerdo de la cumbre de 2018.

Los medios de comunicación estatales del Norte dijeron, previamente, que Pyongyang se está preparando para enviar alrededor de 12 millones de panfletos propagandísticos anti-Corea del Sur, mediante unos 3.000 globos y otros medios, en una medida ojo por ojo contra los folletos enviados desde el Sur.

En respuesta al llamamiento de Seúl para evitar la medida, el Norte dijo que no tiene intenciones de cancelar su plan de envío de panfletos a través de la frontera, refiriéndose al acuerdo intercoreano que prohíbe tal acción como un «documento muerto».

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