Corposalud aclara al CNP de Nueva Esparta situación con la periodista Hilda Mendoza
El director de Corposalud, Elesbán Gómez, rechazó todas las declaraciones hechas por la periodista Hilda Mendoza y replicadas por la seccional regional del Colegio Nacional de Periodistas (CNP) de Nueva Esparta.
Durante un boletín de prensa, Mendoza aseguró que existen irregulares que impiden el libre y correcto ejercicio periodístico.
Además, se irrespeta al comunicador con acciones que, según la agremiada que ocupaba la coordinación de comunicación e información, dejan en evidencia un débil nivel profesional de algunos miembros que laboran allí.
Al respecto Elesbán Gómez, director de CORPOSALUD, destacó lo siguiente:
En fecha 16 de junio de 2020, fue recibido por este despacho vía telemática específicamente a través del correo electrónico utilizado por el ente que actualmente represento, dos comunicaciones de donde se desprenden un conjunto de aseveraciones las cuales en nombre de la Dirección Regional de Salud/ Corposalud y el mío propio rechazo en toda y cada una de sus partes por tratarse de falacias y conjeturas sin fundamento de hechos y mucho menos en derecho, las cuales a continuación paso a esgrimir a través del presente escrito en los particulares siguientes:
PRMERO: La licenciada Hilda Mendoza prestó servicios para la Dirección Regional de Salud/Corposalud como Coordinadora de Comunicación e Información de la mencionada institución, desde el 1 de octubre de 2018 hasta el 26 de mayo de 2020, cargo que se señala dentro del manual descriptivo de cargos del mencionado ente como de alto nivel y de confianza, el cual de acuerdo a lo establecido dentro de los preceptos de la Ley del Estatuto de la Función Publica es un cargo de libre nombramiento y remoción, no se constituye como vía de ingreso a la administración pública de forma permanente, evidenciando que mal se puede emplear el termino como lo alegan en su carta de “destitución” por la definición correcta de remoción.
Es oportuno hacer notar este particular, toda vez, que de ahí derivan muchas interrogantes indicadas en su pronunciamiento denotando una carencia de conocimiento al respecto, lo cual llama potencialmente la atención de quien suscribe, en virtud de que un periodista antes de emitir una nota, un comunicado y más aún un pronunciamiento en nombre de un conglomerado de agremiados y hacerlo público en contra de un ente gubernamental que representa al ejecutivo regional y nacional en el área de salud, busca la verdad de los hechos, investiga y se documenta situación que a toda luces no ocurrió en el caso que hoy nos ocupa.
SEGUNDO: Igualmente, se observa incongruencia en lo expresado en el mencionado comunicado, al denunciar violación de principios de carácter legal y constitucional y señalar que: “ Violenta el mencionado funcionario este derecho consagrado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, así como en la Ley de Ejercicio del Periodismo y su Código de Ética en sus artículos 2 y 3 respectivamente que refieren este ejercicio de libertad de expresión como una de sus formas de actuaciones. En el artículo 2, refiere el Código de Ética, “Establece el origen del ejercicio del periodista en la libertad de expresión y el derecho a la información, normas democráticas consagradas en la Constitución. El periodista debe velar por la vigencia y efectividad de tales principios”.
En tal sentido, fue lo que demandó la mencionada colega Mendoza; en pleno conocimiento que se trata de un cargo de libre remoción, sin embargo, requirió la información de la causa que motivaron su remoción ante su supervisor, Elesban Gómez…” negrillas nuestras
Se puede apreciar la incoherencia en el texto, toda vez, que en el mismo se expresa el término destitución e inmediatamente señala que la licenciada Mendoza está en pleno conocimiento que se trata de un cargo de libre nombramiento y remoción, sin embargo, continua reforzando que no le fueron indicadas las causas para hacer la mencionada remoción. He de destacar, que estos cargos no son motivo de causas justificadas para remover al funcionario que los ocupe, tal como lo indica la norma son de libre nombramiento y remoción en este caso del Director y presidente de Coporsalud.
Así mismo, refiere en el comunicado una negativa de información por mi parte al gremio de periodistas estadal, situación a toda luces falsa en virtud de que como se indica al inicio de esta misiva no se procuró una investigación previa de los hechos
TERCERO:El Colegio de Periodistas respalda como gremio el hecho de que según los dichos de la Licenciada Mendoza, se le cercenaba la libertad de expresión en el ejercicio de sus funciones dentro de la sede administrativa de Corposalud / Dirección Regional de salud. Llama la atención que desde el 01 de octubre de 2018, fecha de ingreso de la referida ciudadana al ente que hoy dirijo, 2 años y 8 meses aproximadamente después la misma no haya denunciado un hecho tan delicado como este. El periodismo bien hecho y la libertad de expresión van de la mano, y quien más que la misma Sra. Mendoza para conocer de fondo todo lo ocurrido durante este periodo de gestión, en donde distintos factores políticos y otros intereses de personas con propósito de causar caos en el sector salud neoespartano, fueron muchas veces denunciados a través de su gestión, no recuerdo haber recibido ni vía verbal ni por escrito situación alguna de incomodidad por parte de ella, mucho menos hablar del menoscabo del derecho a la libertad de expresión en el ámbito periodístico.
CUARTO: Alude igualmente un desconocimiento de la línea comunicacional dictada por parte del ejecutivo regional a este despacho, incurriendo nuevamente en falsos supuestos de hecho, respaldados lamentablemente por la comunidad de periodista en esta entidad insular sin verificar dicha información, vilipendiando no solo a los individuos, al ser humano, al profesional, sino también a los funcionarios que ejercen la función pública desde hace muchos años, con una reputación y carrera publica profesional hoy absolutamente vulnerada y dañada ante la opinión pública, sin medir las consecuencias e impacto a los ciudadanos que hoy dan la cara ante la situación de pandemia que nos arropa y que hemos afrontado con responsabilidad y entrega.
Es de hacer notar que, la libertad de expresión implica deberes y responsabilidades, fundamentalmente para proteger los derechos de terceros, del Estado, del orden público o de la salud moral de la ciudadanía. Incurrir en excesos para perjudicar la carrera o el ejercicio de las funciones públicas de ciudadanos que día a día dan lo mejor de sí en un área tan sensible como lo es la salud, y brindar una visión diferente a la colectividad haciendo apología a violación de derechos, actos de violencia, agresión e intimidación en contra de un periodista, incurriendo en acciones manifiestamente ilegales, lamentablemente patrocinadas por quienes deben resguardar los derechos de un colectivo profesional y de manera irresponsable sin hacer uso debido de sus funciones, propinaron un juicio de valor sin verificar la información dada por la ciudadana antes identificada, sin duda algunas abre la posibilidad del ejercicio de acciones legales por parte de quienes sientan lesionados sus derechos personales.
Es lamentable que el colegio de periodistas del estado se pronuncie sobre un hecho que evidentemente desconoce en su totalidad, en donde hablan de preservar derechos constitucionales de un agremiado sin investigar la realidad de lo ocurrido en sede administrativa de Corposalud/Dirección Regional de Salud, inclusive el evidente desconocimiento de los procedimientos legales que envuelven a los funcionarios dentro de la administración pública, favoreciendo los intereses de un ciudadano por encima de la objetividad y la verdad a que haya lugar.
Entendemos que este gremio ha sido golpeado en estas dos últimas décadas, y han buscado enterrarlos bajo las lápidas de la frustración y de no poder expresarse tal y como deben, sin embargo, creo que tal situación les hizo perder el norte olvidándose en realidad cuál es su función dentro de la sociedad, dentro de la comunidad, dentro de un colectivo que confía y espera veracidad, para ello es necesario hablar con la verdad, buscar la información certera y la fuente confiable para no perder credibilidad. Justificar su existencia como organización de agremiados no puede fundamentarse en la denuncia formulada por una sola persona, no puede aventurarse en emitir un comunicado y hacerlo público perjudicando a otros por salir a flote y pensar que ello no tiene consecuencias, se olvidan de los verdaderos derechos vulnerados durante estos años de gestión al ejecutivo regional y sobre todo en el sector salud. Busco un pronunciamiento del colegio de periodistas del estado sobre ese caso en concreto, la situación del sector salud y cuál es mi sorpresa, no lo consigo, pero es que no lo voy a conseguir porque tenemos claro con este pronunciamiento a lo que están dedicados y sin duda alguna no es la búsqueda de la verdad como norte, ya que le bastó escuchar a una sola persona para conjeturar y continuar el tren de falacias indicadas por la misma.
Finalmente sé cómo profesional y director de salud en el estado, que no todos sus agremiados comparten esa posición, lamento y mi equipo de trabajo lamenta observar como una representación gremial utiliza un hecho aislado para decir aquí estoy y aún existo.