Continúan hospitalizados cuatro reclusos por explosión de granada en PoliMonagas
Cuatro reclusos continúan internados en el Hospital Universitario Dr. Manuel Núñez Tovar tras la explosión de una granada en el área C del centro de detención preventiva de la Policía del estado Monagas, en Maturín.
Familiares de los reclusos informaron este 8 de febrero a El Pitazo que dos de ellos necesitan ingresar a terapia intensiva. En una nota de prensa, el director del hospital, Darwin Moreno, indicó que los detenidos dados de alta tenían heridas ambulatorias.
Los hombres que permanecen en la emergencia del centro asistencial responden a los nombres de José Martínez, de 32 años de edad, a quien le practicaron una laparotomía exploratoria; José Orozco, de 22 años de edad, quien tiene heridas en el brazo izquierdo y la espalda; Rafael Barreto, de 24 años de edad, quien tiene lesiones en el rostro y el pecho; y Rómulo Corrado, de 20 años de edad, con heridas en el brazo izquierdo y la espalda.
Sobre el hecho, el director de la Policía del estado Monagas, coronel Jonny Berroterán, no ha ofrecido mayores detalles. En una nota de prensa, publicada en Instagram, Berroterán explicó que las averiguaciones del caso están en manos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
Sin agua
Luzmila, como pidió llamarse la mamá de un detenido para protegerlo de agresiones de parte de policías y de sus compañeros de celda, denunció que las condiciones higiénicas de los presos no son las más indicadas. Aseguró que hay hacinamiento y que tampoco tienen agua.
“Cuando los detenidos llegaron al calabozo no tenían agua porque se las cortaron. Mi hijo me pidió que le llevara varios botellones, unos para consumirla y los otros para asearse y limpiarse las heridas”, contó Luzmila, quien mostró su preocupación al saber que hay dos reclusos con heridas grandes que deben ser tratadas por los médicos en el hospital.
El padre de otro herido explicó que esos internos están durmiendo en el piso y que corren el riesgo de que las heridas se infecten. “Creo que las autoridades deberían reconsiderar trasladar al hospital a aquellos detenidos que tienen heridas profundas”, expresó el hombre, cuyo hijo resultó con lesiones menores tras el estallido de la granada.
Los parientes aseguraron que los funcionarios realizaron una requisa mientras los presos estaban hospitalizados. “Antes de que los presos pudieran entrar al calabozo, los dejaron en pleno sol sin importarles las heridas”, denunció el hombre. Sin embargo, sobre esto, el director de la Policía no se había pronunciado hasta el momento de publicar esta información.
Con información de El Pitazo