Nacionales
Buscan a dos estudiantes de medicina desaparecidas desde el día domingo
Dos jóvenes estudiantes de medicina, Nazareth Villa y Alexandra Mendoza, han desaparecido en circunstancias misteriosas, sumiendo en la consternación a sus seres queridos y despertando la atención de las autoridades. Estas damas de juventud prometedora fueron vistas por última vez el pasado domingo, cuando se aventuraron en compañía de unos supuestos “amigos” en un viaje hacia La Guaira, en un vehículo particular. Sin embargo, el regreso a sus hogares se convirtió en un enigma, desatando la preocupación y la urgencia por hallar su paradero.
La noche se desvaneció sin dejar rastro de las dos estudiantes, y sus teléfonos móviles permanecen en un silencio angustiante, apagados y mudos testigos de una incertidumbre que crece en el corazón de sus familias. Ante la ausencia prolongada, la inquietud se convirtió en acción decidida, dando inicio a una intensa búsqueda que abarcó tanto los litorales de La Guaira como los parajes urbanos de Caracas.
La denuncia sobre su desaparición fue presentada ante la prestigiosa División de Víctimas Especiales del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), reconocida por su labor incansable en la resolución de casos delicados. Los investigadores, con su compromiso y pericia, se han abocado a indagar minuciosamente cada pista, persiguiendo la esperanza de encontrar un hilo conductor que conduzca al paradero seguro de estas jóvenes de valía.
Con el objetivo de ampliar el alcance de la búsqueda y recabar información relevante, los familiares, movidos por una angustia que trasciende todas las barreras, han recurrido a las poderosas redes sociales. Allí, a través de fotografías compartidas con amor y desesperación, han solicitado incansablemente la colaboración de la comunidad, instándola a viralizar las imágenes y difundir el llamado de auxilio. En un gesto de desesperada esperanza, han facilitado un número telefónico (0424-2847553) al cual se pueden comunicar aquellos que posean cualquier indicio que pueda arrojar luz sobre el paradero de Nazareth y Alexandra.
La incertidumbre y la angustia se han enraizado en el seno de las familias afectadas, así como en el ámbito de las autoridades, quienes han unido fuerzas en una labor ardua y sin descanso para desentrañar este inquietante caso de desaparición. La ansiedad por obtener noticias que conduzcan al hallazgo seguro de las dos estudiantes de medicina se vuelve palpable, y todos aguardan con fervor la aparición de esa información crucial que permita encaminar una pronta solución a esta angustiante situación.
En medio del misterio que envuelve a Nazareth Villa y Alexandra Mendoza, se teje una red de esperanza y solidaridad, donde cada palabra, cada imagen compartida y cada llamada telefónica se convierten en piezas clave de un rompecabezas que anhela ser resuelto. La sociedad en su conjunto se une en un clamor unísono, buscando aferrarse a la certeza de que el retorno de estas jóvenes brillantes está próximo, y que la oscuridad que las envuelve se disipará para dar paso a la luz de su regreso triunfal.
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