Argentinos estarían huyendo del “chavismo” de Alberto Fernández
Las políticas de subsidios de servicios públicos en Argentina hacen recordar a la decadente Venezuela en los años previos a su crisis humanitaria.
Los argentinos huyen del llamado “chavismo” del presidente Alberto Fernández pese a las restricciones inherentes a la pandemia. “Es muy doloroso porque dejas un país en llamas, una Argentina que yo amé y le aposté todo desde chico”, fueron las duras palabras que Alberto Fontana dijo a La Nación.
Vea también Tres tanqueros de PDVSA estarían aislados por brote de Covid-19
“Me duele brutalmente. Pero tengo 58 pirulos (años), laburo (trabajo) desde los 18 y quiero decidir cómo van a ser mis próximos años. Acá puedo. Me dan el ejemplo que siempre quise ver. Extraño, sí, pero soy libre”, agregó.
Las políticas de subsidios de servicios públicos en Argentina hacen recordar a la decadente Venezuela en los años previos a su crisis humanitaria.
Algunos medios internacionales como The Guardian y The Economist han reseñado algunos análisis que aseguran que las razones del por qué han escogido a Uruguay son muchas. El manejo de la pandemia, la flexibilización de las medidas fiscales decretadas por el presidente Luis Lacalle Pou y una situación de crisis en Argentina son algunas de ellas.
El “éxodo” argentino a Uruguay es por decisión de algunos que en épocas de bonanza iban a Punta del Este a vacacionar y por ser un sitio conocido decidieron aventurarse y probar. Especialistas aseguran que la migración que comenzó a inicios de la pandemia de Covid-19. Los que cruzaban estaban en un estrato social de lo más alto. Sin embargo la tendencia ha ido cambiando a un nivel medio alto.
“No tiene que ver con el gobierno de turno. Años de historia de Argentina muestran que no hay estabilidad, que no podés (puedes) planificar, no podés ahorrar para fin de año. Quiero que mis hijos crezcan en un lugar donde pueden planificar la vida en función de lo que ganan”, describió Paula Peralta Ramos, una coach ontológica que llegó a Uruguay junto a su familia.
Otro que emigró fue el chef fue Álvaro Aristizabal, un hombre de 43 años que lleva más a tierra la idea de vivir en Uruguay porque asegura que “no es un lugar utópico”, pero “se vive mucho mejor”.
“Conectás con cosas simples de la vida. En la Argentina mi restaurante quedaba a 23 cuadras de casa, pero a mis hijas las veía por videollamada. Normalizar eso está muy mal. Me quedan 25 años de productividad extrema. ¿Por qué tengo que pasarlos corriendo atrás de algo?”, cuestionó.
El chef de 43 años también radicado en Punta del Este, dijo que en la ciudad la vida es “más armoniosa” y puso como ejemplo cómo es vivir un fin de semana. Esto, cuando hay más movimiento en restaurantes. «Los fines de semana trabajo una incontable cantidad de horas. A la tarde, cuando corto un rato, me tiro en la playa si está lindo. Ahí es donde haces la diferencia”.
Con información de Caraota Digital
