Conoce el fascinante hallazgo de 4 nuevas especies de tiburones
La primera especie de tiburón caminador, Hemiscyllium galei, fue descubierta en 2006 en la Bahía Cenderawasih (Indonesia). Desde entonces, solo se tenía conocimiento de 5 especies de estos peces que, aunque pueden nadar si es necesario, casi siempre utilizan sus aletas pectorales para trasladarse entre los arrecifes de coral.
Ahora, cuatro nuevas especies de tiburones caminantes han sido descubiertas en las aguas del norte de Australia y Nueva Guinea.
Y aunque eso podría infundir temor en ciertas personas, los investigadores de la Universidad de Queensland (UQ) aseguran que las únicas criaturas que tienen motivo para preocuparse son los peces pequeños y algunos invertebrados.
Una extensa investigación
El hallazgo de los tiburones que caminan es producto de una investigación realizada a lo largo de 12 años. En la que participaron otras organizaciones como Conservation International, el CSIRO, el Museo de Historia Natural de Florida. El Instituto de Ciencias de Indonesia y el Ministerio de Asuntos Marinos y Pesca de Indonesia.
La directora de la investigación, Christine Dudgeon de UQ, dijo que los tiburones con diseños ornamentales eran los principales depredadores en los arrecifes durante las mareas bajas. Momento en el que usan sus aletas para caminar en aguas muy poco profundas. Y explicó además:
Con menos de un metro de largo en promedio, los tiburones caminantes no representan una amenaza para las personas. Pero su capacidad para soportar ambientes con poco oxígeno y caminar sobre sus aletas les da una ventaja notable sobre sus presas de pequeños crustáceos y moluscos.
Estas características únicas no son compartidas con sus parientes más cercanos, los tiburones bambú o parientes más lejanos en el orden de los tiburones alfombra. Incluyendo las especies wobbegongs y los tiburones ballena.
¿Cómo evolucionaron?
Con las nuevas cuatro especies, ya son nueve en total las que se conocen de tiburones que caminan. La doctora Dudgeon indicó que estos peces viven en aguas costeras alrededor del norte de Australia y la isla de Nueva Guinea, ocupando su propia región separada.
“Estimamos la conexión entre las especies sobre la base de comparaciones entre su ADN mitocondrial que se transmite a través del linaje materno. Este ADN codifica las mitocondrias, que son las partes de las células que transforman el oxígeno y los nutrientes de los alimentos en energía para las células” detalló.
Los datos sugieren que las nuevas especies evolucionaron después de que los tiburones se alejaron de su población original, se aislaron genéticamente en nuevas áreas y se convirtieron en nuevas especies.
Según la experta, es posible que los tiburones caminantes se hayan movido nadando o caminando sobre sus aletas, pero también es posible que hayan “tomado un viaje”. En arrecifes que se movían hacia el oeste a través de la cima de Nueva Guinea, hace unos dos millones de años.
Con información de Punto de Corte