Comerciantes petroleros aprovechan el alivio de sanciones a Venezuela para negociar acuerdos, según Reuters
Luego de la relajación de las sanciones energéticas impuestas por Estados Unidos al país sudamericano la semana pasada, comerciantes globales de energía emergen como los primeros adquirientes de los inventarios de crudo y fueloil disponibles en Venezuela, según fuentes cercanas al asunto citadas por la agencia de noticias Reuters.
Desde 2019, las sanciones han limitado en gran medida las exportaciones de la petrolera estatal PDVSA hacia sus mercados preferidos. Sin embargo, la reciente flexibilización de las medidas por un período de seis meses ha abierto la posibilidad de ventas puntuales por parte de PDVSA y la reactivación de algunos contratos de suministro, lo que podría impulsar sus ingresos.
Empresas refinadoras de Estados Unidos, Europa y Asia, como Reliance Industries, Tipco Asphalt, Valero Energy, PBF Energy y Eni, están en negociaciones con PDVSA para reanudar o ampliar las importaciones de petróleo venezolano. Eni busca mejorar la eficacia de sus actividades de cobranza de deudas mediante el intercambio de petróleo y tiene la intención de aumentar la producción de petróleo y reanudar las ventas del crudo Corocoro. Maurel & Prom, la empresa francesa que adquirió los activos de Shell en Venezuela, también ha solicitado autorización para recibir petróleo y cobrar deudas pendientes.
PDVSA cuenta actualmente con alrededor de 30 millones de barriles de crudo y combustibles almacenados, una cantidad considerable aunque inferior al pico de más de 40 millones de barriles acumulados después de la imposición de las sanciones en 2019.
Los posibles compradores deberán obtener la autorización de los departamentos legal y de cumplimiento, además de renegociar precios. Sin embargo, se enfrentan a la reticencia de muchos propietarios de buques para cargar en Venezuela, lo que mantiene los costos de flete elevados y ha llevado a la inclusión de cláusulas contractuales especiales para “zonas de guerra”. Además, Venezuela está solicitando a muchos potenciales clientes, especialmente en el mercado ocasional, que paguen por adelantado los cargamentos.
Los problemas de calidad del crudo, derivados de la deteriorada infraestructura de PDVSA, también serán difíciles de resolver y podrían seguir generando descuentos en los precios. Además, PDVSA aún no ha recuperado el acceso a servicios de fijación de precios y software clave para el seguimiento de contratos, los cuales fueron suspendidos como parte de las medidas estadounidenses. PDVSA ha reorganizado su negocio comercial y sus finanzas para evitar incumplimientos de pago después de sufrir pérdidas multimillonarias.