Misión para combatir bandas criminales en Haití es aprobada por la ONU
En una jornada histórica, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) ha tomado una determinación crucial al otorgar su aprobación unánime al envío de una misión internacional liderada por Kenia hacia la atribulada nación de Haití. En medio de un panorama desolador, esta iniciativa tiene como objetivo primordial brindar un apoyo vital a la nación caribeña en su lucha contra las pandillas armadas que han asolado ciertas áreas, desencadenando una violencia brutal que ha sumido a la economía y a los servicios de salud en una profunda crisis.
El ministro de Asuntos Exteriores de Haití, Jean Victor Geneus, ha considerado esta resolución, respaldada abrumadoramente con 13 votos a favor, como un “rayo de esperanza” en medio de la oscuridad que ha envuelto al país. Sin embargo, en esta votación trascendental, Rusia y China han optado por abstenerse. Además del envío de la misión, la resolución también impone un embargo de armas ligeras, que hasta ahora solo se aplicaba a los líderes de las sanguinarias bandas criminales.
Esta “misión multinacional de apoyo a la seguridad”, que opera de manera independiente a la ONU, se extenderá inicialmente por doce meses y se realizará una revisión planificada a los nueve meses. Su propósito fundamental radica en brindar un apoyo operativo a la policía haitiana en su lucha contra las pandillas, al tiempo que contribuye a salvaguardar la seguridad de escuelas, puertos, hospitales y aeropuertos, con el objetivo último de mejorar las condiciones generales de seguridad en Haití.
Con la facultad de implementar medidas de emergencia temporales y proporcionadas, incluyendo detenciones, siempre en estricto cumplimiento del derecho internacional, la misión tiene como fin primordial evitar la pérdida de vidas inocentes. Aunque el tamaño exacto de la misión no ha sido especificado en el proyecto de resolución, se han sostenido discusiones acerca de la posible implementación de una fuerza compuesta por aproximadamente 2.000 efectivos.
En un momento de profunda crisis, busca brindar un apoyo crucial a Haití con la esperanza de restaurar la paz y la estabilidad en esa nación azotada. La comunidad internacional se ha unido en un esfuerzo conjunto para enfrentar de manera decidida a las pandillas armadas y garantizar la seguridad de la población haitiana, al tiempo que se impulsa el desarrollo y la reconstrucción de la nación, que clama por un futuro más próspero y seguro.