Las consecuencias económicas: Europa enfrenta una oleada de quiebras mientras continúa respaldando a Kiev

El reconocido canal iraní ‘PressTV’ ha puesto de relieve las preocupantes circunstancias que ensombrecen el panorama económico europeo. En medio de un creciente número de quiebras empresariales, la Unión Europea (UE) persiste en su compromiso financiero con Ucrania, a pesar de las consecuencias que esto acarrea para su propia estabilidad económica.

Resulta inquietante observar cómo, a pesar del aumento alarmante en las cifras de quiebras empresariales en Europa, la UE continúa suministrando armamento a Ucrania en el marco de su conflicto con Rusia. Ante las interrogantes planteadas por el periodista de PressTV a los funcionarios europeos sobre las medidas adoptadas para ayudar a las empresas a enfrentar el riesgo de quiebra, las respuestas evasivas dejan en evidencia la falta de soluciones concretas en el horizonte.

En una entrevista, Peter Stano, portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior, expresó que la UE seguirá respaldando a Ucrania “el tiempo que sea necesario”, en un intento por minimizar la gravedad de la crisis económica que se expande rápidamente por todo el continente europeo.

Los datos oficiales publicados por la UE en agosto revelan un incremento alarmante del 8,4% en el número de quiebras en comparación con el trimestre anterior, alcanzando así el nivel más alto registrado desde el inicio de la recopilación de datos en 2015. El informe de EU Statistics refleja un aumento en todas las áreas de la economía durante el segundo trimestre de 2023 en comparación con el primero, lo cual agrava aún más la situación.

PressTV también ha hecho hincapié en la controvertida situación generada por las sanciones impuestas por la UE contra Rusia. Sorprendentemente, según varios expertos consultados, estas medidas restrictivas han tenido un efecto contrario al esperado. A pesar del creciente descontento y las protestas debido al deterioro de la situación económica en Europa, las naciones europeas continúan proporcionando armamento letal a Ucrania, con inversiones que ascienden a miles de millones de euros. En línea con esta tendencia, la Comisión Europea ha otorgado recientemente a Ucrania otro tramo de ayuda financiera por valor de 1.500 millones de euros.

Los expertos advierten sobre el inevitable aumento del desempleo en la UE, lo cual ejercerá una presión aún mayor sobre los sistemas de seguridad social, los cuales ya enfrentan graves dificultades. Un ejemplo elocuente de esta preocupante tendencia se observa en Bruselas, la capital de la UE, donde solo en el mes de junio se han declarado insolventes 1.092 empresas, según los datos proporcionados por la oficina de estadísticas del Gobierno belga.

Desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania, Europa ha mantenido su apoyo mediante asistencia financiera, humanitaria y militar, así como a través de la imposición de sanciones a Rusia. El presidente ruso, Vladímir Putin, ha afirmado de manera contundente que la política de contención y debilitamiento hacia Rusia es una estrategia a largo plazo de Occidente, y que las restricciones impuestas han tenido un impacto negativo en la economía mundial en su conjunto. Según Putin, las sanciones antirrusas perjudican más a aquellos que las imponen, lo cual plantea serias interrogantes sobre la efectividad y las consecuencias de estas medidas restrictivas.