9 de 10 pacientes contraen bacterias en el Hospital Universitario de Maracaibo
Lo llaman un hospital centinela para la atención de pacientes con Covid pero “sin un sólo medicamento que ofrecer”.
Las condiciones en las que se encuentra el Hospital Universitario de Maracaibo en el estado Zulia, son inhumanas. Su funcionamiento es de apenas 25%.
De los 10 pisos que tiene la estructura y en los que se atendían todas las patologías, sólo quedan 4 precariamente operativos.
En tal sentido, los trabajadores se quejan a una sola voz por el abandono en el que el mandatario regional, Omar Prieto, ha sumergido al hospital.
En el área de la emergencia los aires acondicionados no funcionan. Los 3 pabellones que hay están cerrados desde hace años. Para operar sólo están disponibles 3 de los 11 pabellones del quinto piso que tampoco tienen aire acondicionado.
“A los médicos cuando están operando les echan viento con un cartón. El paciente debe llevar todos los insumos, desde el alcohol. Operar sin las condiciones ambientales genera una proliferación bacteriana, por eso 9 de cada 10 pacientes se infectan en quirófano”, precisó uno de los médicos que prefirió mantenerse en el anonimato.
¿QUÉ PASA EN EL HOSPITAL UNIVERSITARIO?
Las precariedades de esta institución de salud con 60 años de funcionamiento pican y se extienden. La Unidad de Cuidados Intensivos sólo tiene capacidad para recibir 5 pacientes. Hay 4 camas adicionales habilitadas en un área especial a la que “sólo tienen acceso los médicos cubanos”.
Lo llaman un hospital centinela para la atención de pacientes con Covid pero “sin un sólo medicamento que ofrecer”.
Familiares de los pacientes recluidos coinciden en que lo único que el hospital garantiza es la toma de oxígeno, porque todo lo demás, incluida la prueba, debe aportarlo el enfermo.
“Los casos de Covid están subiendo en el Zulia. Aquí en el Universitario, del que tanto se llenan la boca llamándolo hospital centinela, no tenemos ni una inyectadora. Todo, absolutamente todo, debe traerlo el paciente”, dijo una enfermera.
A la situación se suma la falta de ascensores, ya que los mismos están dañados, y los enfermeros deben trasladar a los pacientes por las escaleras.
Según los datos aportados, los tomógrafos tampoco no sirven desde hace 7 años, la Unidad de Gastroenterología está cerrada y “no se hacen endoscopias”.
Por su parte, el funcionamiento de Rayos X está en 15%. En el Banco de Sangre no hay reactivos y sólo se hacen exámenes de glicemia, úrea y los otros más básicos.
De las 5 neveras que tenían para conservar la sangre, sólo hay 1 y ya está fallando por las altas temperaturas. Sólo hay capacidad para “atender 20 donantes diarios de los 150 que se recibían”.
Con información de Caraota Digital.
